sábado, abril 25, 2009

conmemorar

La memoria de lo acontecido a nuestras vidas interiores es también redentora. Existen acontecimientos que desgarran nuestro propio tiempo y abren sus bocas y escuchamos sus gritos aún en la lejanía de los tiempos: ¡no olviden! ¡Ganamos! ¿Y lo que perdimos? Lo ganamos en otro lado y debemos encontrar en lugar en donde está acumulada esa ganancia. Al final podemos decir como el Nietzsche- Zaratustra: “¿Y esta era la vida? Pues que vuelva a empezar”

Hoy en la mañana me despertado pensándolo y por algún indicio mientras me estaba bañando, me encontré con las imágenes desoladoras de mi vida hace exactamente una año. Luego vino mi hermano Diego a recordarlo. ¿Tiene sentido el sufrimiento? De cierto modo dejamos de sufrirlo cuando le encontramos algún sentido.


Ha dicho Viktor Frankl:

“Con frecuencia el hombre se fija únicamente en la rastrojera de lo transitorio y pasa por alto el fruto ya granado del pasado, pues en el pasado quedan cincelados los valores, y sus gozos y sufrimientos. de ahí del pasado el hombre es capaz de rescatar sus acciones”


El futuro no se escruta, es un remanente de esperanza, cada momento que se sucede es una ventana abierta por la que entrará nuestra plenitud, nuestro kairos.

2 comentarios:

el Kontra dijo...

Muy bueno José, la cita de Frankl es de tomar en cuenta. Buen blog!

la-filistea dijo...

Nuestro "Kairos"... es cierto, pero la transición del "cronos" a "kairos" es lo jodido.. ¡como duele!