viernes, agosto 31, 2007

De los más maricas

"El fariseísmo no es una degeneración que aparezca en el hombre bueno: una buena parte de aquél es, antes bien, la condición de todo ser-bueno." (Federico Nietzsche: Más allá del bien y el mal)

El juego de legalidad y perversión (lo bueno y lo malo) se establece comúnmente bajo criterios de los grupos hegemónicos y resulta cayendo constantemente en el puritanismo burdo, un ejemplo de ello es el caso del senador republicano Larry Craig.

Yo he visto demasiada gente dedicar bastante tiempo en su lucha contra los “demonios”, y terminar convirtiéndose en uno de ellos. Nuestro senador republicano, protestante, etc., tanto ha hablado contra los homosexuales que pareciera despreciar sus tendencias sexuales. ¡Lo agarraron con las manos en la masa senador!

Ya lo dice el mismo Nietzsche: 
 
"A veces la misma necedad es la máscara usada para encubrir un saber desventurado demasiado cierto"

No se puede y no se debe juzgar ha Craig por ser gay, pero si por seguir cooperando en la construcción de una forma excluyente, en donde si él fuera más sincero ante la sociedad, formaría parte de los excuidos.

Por otro lado me imagino lo dificil que ha de ser vivir sosteniedo las apariencias dentro de esos grupos tan conservadores.

Hay algo que además me viene a la mente en este momento. Nosostros pensamos que la sociedad gringa es la que nos muestran las peliculas: esa sociedad liberal, cosmopolita. Pues bien, la mayoría de peliculas esconden precisamente a ese grueso de la población estadounidense: Puritana, consevadora, y sobre todo la que -dentro de lo que se llama democracia- mantine hoy en el poder a Bush.

¡Cuidado con la Alianza Evagélica y el Consejo Apostólico! ¡Cómo que dicen apoyar a cierto candidato de la mano tiesa!

1 comentario:

ale dijo...

Este Craig parece que se pasó la vida luchando contra sus propios demonios. Me alegré que alguien tan conservador quedara fuera por haber sido atrapado con las manos en la masa. Sin embargo, también me dio mucha pena, porque alguien que niega su naturaleza con tanto fervor nunca pudo ser muy feliz. Qué forma de desperdiciar la vida.

Me alegré de encontrar un blog chapín que abordó el tema este (también buena onda publicar lo de Giammattei y el aborto, ojalá más gente se animara a discutir estas cosas abiertamente).